martes, 15 de marzo de 2022

PREMIOS NACIONALES DE FOTOGRAFÍA

Cristina García Rodero - 1949 - Premio Nacional de fotografía 1996

Cristina García Rodero es la primera fotógrafa española miembro de la prestigiosa agencia Magnum. Su obra manifiesta un hondo interés por el comportamiento humano y las dualidades y contradicciones de la existencia: religioso-pagano, natural-sobrenatural, vida-muerte, placer-dolor, guerra-paz…
Su mirada indaga sobre las tradiciones y ritos que han sobrevivido durante siglos y las nuevas creencias y manifestaciones, fruto de los cambios económicos y políticos, de las necesidades actuales y los conflictos sociales.







Descripción de la imagen.


Ésta es una fotografía horizontal en blanco y negro. En ella podemos apreciar a seis hombres de distintas edades (todos ellos adultos) subidos a un banco de piedra, y a una mujer mayor a su derecha en el suelo. Todos ellos llevan ropa sencilla, muy propia de la época, especialmente la mujer, que va de negro y con un pañuelo también negro en la cabeza. Cuatro de los hombres (los que parecen de mayor edad) llevan una boina negra, y practicamente todos llevan una camisa blanca por debajo de un jersey fino, con una sobre camisa por encima.
A la derecha de la imagen se puede ver parte de una ventana con barrotes negros, por lo que podemos deducir que están posando delante de una casa, la cual podría pertenecer a alguno de ellos.
Los seis hombres tienen una actitud tranquila, algunos mirando al cielo y todos ellos con las manos en los bolsillos, mientras que la mujer que está en el suelo se toca la cara con la mano derecha dando a entender que está ligeramente preocupada o desorientada.
Con esta obra la autora podría haber querido representar las diferencias sociales al poner a los seis hombres más altos que la mujer, diferenciando así las facilidades que los hombres tienen en el trabajo respecto a las mujeres, completamente infravaloradas en esa época en todos los ámbitos laborales. Ella podría ser la madre de todos ellos, o simplemente una mujer mayor del pueblo a la que quieren como si realmente fuera su madre y respetan como a un igual.


Isabel Muñoz - 1951 - Premio Nacional de fotografía 2016

Isabel Muñoz es fotógrafa Premio Nacional de Fotografía que considera que los cuerpos hablan como si fueran libros y que si bien la sonrisa puede engañar, los ojos nunca pueden hacerlo. Sus obras son reflejo de una mirada en permanente búsqueda. Para Isabel Muñoz la fotografía cuenta cosas, como un lenguaje. Busca combinar el compromiso social con la búsqueda de la belleza, ahondando en temas como el cuerpo, el rito o la diversidad cultural.







Descripción de la imagen.


Esta es una fotografía horizontal en blanco y negro, con el fondo completamente negro para destacar así las figuras principales. 
En esta imagen se nos presenta una mano humana con varias medusas alrededor, una de ellas, la de mayor tamaño y de un fuerte color blanco que consigue llamar muchísimo la atención, está en contacto con la mano. 
Esta fotografía consigue unir la belleza de lo humano con la belleza del mundo animal, nos muestra la bonita combinación y armonía entre ambos.
La autora quería representar su amor por la naturaleza pero sin hacerla idealizada y distante al ser humano. En este caso ha escogido un animal (la medusa) que suele "asustar"a la gente por el grave dolor que puede causar hasta con un simple roce en la piel.
He elegido esta imagen, no por que deje mucha libertad a la imaginación a la hora de interpretarla, sino porque de las cuatro fotografías anteriores es la que creo que mejor representa la obra general de la artista y lo que ella quería representar según lo que dice en el vídeo visto en clase, esa unión del ser humano con la naturaleza, en especial el agua, ya que ella resalta que los seres humanos "somos agua".


Alberto García-Alix - 1956 - Premio Nacional de fotografía 1999

Medalla de Oro de las Bellas Artes en 2019, es uno de los grandes nombres de la fotografía contemporánea. Su obra, reconocible por su descarnada sinceridad y elegancia, refleja sin censuras un mundo donde los amigos, las motos, los tatuajes o las drogas se funden en una visión existencial marcada por su carácter autobiográfico.






Descripción de la imagen.


Esta imagen es una fotografía cuadrada en blanco y negro. En ella vemos a una mujer muy elegante y maquillada posando en un sofá con un niño pequeño en brazos, ella es rubia con el pelo corto y algo despeinado, lleva un vestido negro muy corto y escotado con mucho brillo, lo cual entre otras cosas la ayuda a destacar en la fotografía. Detrás del sofá hay una pared a rayas y una puerta con la pintura desgastada.
El sofá sobre el que se encuentra la mujer está cubierto por una tela arrugada y tiene un cojín muy decorado, con lo que parece un dibujo infantil.
La mujer de la imagen muestra una cara seria, como si la fotografía fuera importante para ella y querría mostrar su lado más profesional. El niño que tiene en brazos está llorando desconsolado y con su mano derecha parece que intenta limpiarse las lágrimas.
En el suelo, hay un perro poco más grande que el niño con unas orejas muy largas y con un pelaje claro con manchas oscuras, está muy atento a algo que podría estar sucediendo a la derecha de la imagen.
Esta obra podría representar los problemas de una madre soltera, que lucha cada día por ganar el dinero suficiente para poder ofrecer a sus hijos una buena vida. A la mujer podrían acabar de despedirla y ha tenido que recurrir a que le hagan fotografías para una revista cutre para ganar un poco de dinero, bastante menos del que necesita.